Las esperanzas puestas por los seguidores en The Office tras la marcha de Michael Scott (Steve Carell) eran más bien escasas, pero Dunder Mifflin, la compañía papelera más divertida de Scranton (Pensilvania) se ha sabido reponer a la perfección de tal duro varapalo sin que echemos mucho de menos la vergüenza ajena que provocaba Michael.
Andy Bernard (Ed Helms) comanda en esta octava temporada a la esta singular plantilla de empleados, entre los que sigue destacando Dwight Schrute (Rainn Wilson). Ganan protagonismo Robert California (James Todd Spader) y la nueva recepcionista Kelly Erin Hannon (Ellie Kemper) en detrimento de la pareja formada por Jim y Pam (John Krasinski y Jenna Fischer). Se echan mucho de menos las excentricidades de temporadas anteriores de Creed Bratton.
El resto del equipo siguen a lo suyo, es decir, no han cambiado en absoluto las rarezas de Kevin Malone, Stanley, Meredith, Angela, Óscar, Phyllis (hace días que no sabemos nada de su marido Bob Vance de Frigoríficos Vance), Darryl, y los también guionistas de la serie, Ryan, Toby, Kelly y Mose Schrute.
El humor absurdo de la serie de NBC goza de muy buena salud, deseando que sean muchas temporadas más las que nos hagan reír.
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