Me cuesta horrores hacer una reseña de un disco de Chinarro. Creo que los discos de este genio se miden dependiendo de su estado anímico. Su anterior "El mundo según" sorprendió a todos por su vitalidad y a su vez el optimismo que transmitían sus canciones, hecho inédito en sus trabajos anteriores. "Ronroneando" se oscurece por momentos y el desamor vuelve a estar presente en muchas de sus letras, como es el caso de la tremenda "Anacronismo" o "El gran poder". El inicio del disco es bárbaro con "Los Ángeles", "Tímidos" y "Los amores reñidos" y el momento verbenero "El teórico" deslumbrante. Si en la anterior entrada hablaba de uno de los mejores discos foráneos, en ésta afirmo que uno de los mejores discos nacionales del año sin dudarlo ni por asomo lo firma Antonio Luque.
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