A estas alturas de mi vida no sabría muy bien cómo pasar el tiempo si no fuera por las series de HBO (Los Soprano, Roma, The Wire, Six Feet Under, Deadwood, Little Britain USA, Big Love...). La nueva y fantástica propuesta de la productora estadounidense es True Blood, serie creada por Alan Ball ("A dos metros bajo tierra") que acaba de estrenarse en nuestro país. Basada en la novela Southern Vampire de Charlaine Harris se nos traslada a un nuevo modelo de sociedad, concretamente en Luisiana (Nueva Orleans) en la que los vampiros luchan por sus derechos y pretenden vivir en igualdad con el resto de mortales. Los vampiros ya no tienen la necesidad de matar a humanos para poder sobrevivir ya que beben sangre artificial embotellada importada directamente desde Japón. Nuestros protagonistas Sookie, una mortal con poderes telequinésicos, y Bill un vampiro recién llegado a la ciudad, prometen horas de entretenimiento variado. Humor, terror, amor... todo ello bajo el toque característico de las propuestas moralistas de Alan Ball. Promete y mucho.
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