Socorrismo

"En el camino a Rodalías compiten sin querer la moto hispano-suiza del de los higos con la moto alemana de Javi, el buzo, que vende pescado en la calle los martes, entre la bisutería, las aceitunas y las bragas baratas que resumen la codicia de las mujeres, que tardan en contentarse lo que el suelo de sus salitas de estar en secarse, lo que los gitanos en irse al pueblo vecino al día siguiente, donde la venta ambulante vuelve a estar autorizada, y los billetes pequeños siguen siendo servilletas de manos sucias, lejos de la cara blanca del inspector fiscal, esa momia de las fiestas a la que Aurora es incapaz de ponerle nombre por mucho que indague con Rosario, que dice que, por la descripción, cree haberlo visto con la pareja de guardias y el inglés de la mina yendo a las oficinas del Atleti. Traje gris, corbata gris, camisa blanca, jubilación cercana, ¿quién si no?"

Extraído de " Socorrismo" de "Antonio Luque". Ed. Alpha Decay